Aquí hay un gran ejemplo de cómo los agentes de IA te permiten realizar trabajos nuevos que antes no habrían sido posibles. Hoy estuve en una reunión con un cliente donde demostramos una experiencia de producto utilizando una experiencia completamente personalizada de su parte. La aplicación fue construida principalmente con IA, y nos permitió mostrar la propuesta de valor de manera mucho más realista. Antes de la IA, esto se habría hecho con diapositivas o una demostración mucho más genérica. Lo que, obviamente, significa que el cliente tiene que hacer mucho más trabajo para imaginar la propuesta de valor, poniendo la carga más sobre ellos. Pero con la IA, se volvió rentable (en términos de tiempo) construirle al cliente un prototipo funcional. Esto probablemente cambiará nuestros complejos procesos de ventas en el futuro. Cuando hablamos de agentes de IA que te permiten hacer más cosas de las que hacías antes -no solo reemplazar lo que ya hacemos- este es un ejemplo perfecto.